domingo, 20 de julio de 2014

David Bisbal hace grande el Castillo de San Sebastian

El cantante almeriense actúa por cuarta vez en la capital gaditana ante un público totalmente entregado

Mucho ha llovido desde que David Bisbal actuara por primera vez en Cádiz. Corría el verano de 2004 y se encontraba promocionando su primer disco en solitario 'Corazón latino'. En aquella noche un joven de rizos encandiló a los centenares de gaditanos congregados en el patio del colegio de San Felipe Neri.

Diez años después, un Bisbal más maduro, más emocional y cercano, volvió a hacer vibrar a un público totalmente entregado al espectáculo comandado por el almeriense.

David Bisbal pisaba con fuerza pasadas las diez y media el escenario del Castillo de San Sebastián en Cádiz y, al instante, el público enloquecía cuando comenzaba a sonar el primer tema 'Tu y yo', que da nombre a la gira y al disco. El almeriense supo crear un ambiente especial en el que conectó con los asistentes a través de las canciones de su último disco como ' Diez mil maneras', 'Para enamorarte de mi' o 'No amanece' y algunos de sus éxitos anteriores que no defraudó a nadie. El escenario ayudó. Tras actuar en anteriores ocasiones en la playa Victoria o en el Gran Teatro Falla, el Castillo de San Sebastián no sólo no le falló sino que contribuyó a dotar de hasta cierta magia a la noche, que se volvió inolvidable para muchos de los asistentes.

Las puertas se abrían antes de las diez para que el acceso fuera lo más controlado posible. Las carreras se desataban por coger la primera fila. La locura se hacía más evidente cuando en las pantallas LED comenzaban a proyectar secuencias de Videoarte Bisbal, el mediometraje protagonizado por el propio artista y la actriz María Valverde, y dirigido por Kike Maíllo.

Había largas colas de fans que se habían comenzado a formar desde 24 horas antes. Algunas contaban que habían pasado la noche bajo el Balneario para poder estar en primera fila. El objetivo era no perderse ningún detalle de la actuación del cantante. Una vez en la explanada se encontraron con un gran escenario montado y dotado de un sistema de sonido de más de 170.000 watios y varias pantallas gigantes para que nadie se perdiera detalle alguno del concierto.

Por delante dos horas de buena música en el que hubo tiempo para bailar, para escuchar y para dejar embriagar por el arte del cantante almeriense. Y es que doce años sobre las tablas hacen mucho y a David Bisbal son pocas las cosas que se les escapa de controlar. El cantante supo animar al público (aunque poco le costó), y también relajarlos con algunas de sus baladas más seguidas. Un camino en el que Bisbal guió a través de sus canciones a los centenares de personas congregadas (el concierto tenía todas las entradas agotadas). Y el público respondió. Se dejó llevar y «hasta volar» con algunos de los grandes éxitos del cantante.

Poco queda ya de aquel joven que participó en un programa de televisión para cumplir el sueño de ser cantante. La persona que se subió al escenario del Castillo de San Sebastián para inaugurar los Conciertos para la Libertad, era todo un artista cuyo nuevo trabajo va camino del Triple Disco de Platino, mientras que el primer sencillo del álbum,' Diez mil maneras de olvidar' es ya Disco de Platino Digital y número uno en radio durante cinco semanas.

Bisbal se despidió ayer de Cádiz dejando al público con más ganas de canciones y esperando que esta vez tarde menos en volver.